viernes, 2 de julio de 2010

Cómo birlar cifras sin enrojecer








Palacio siglo XVIII. Colegio de Economistas de Málaga
Decir una verdad a medias es peor que una mentira, pero ello no impide que la mayoría de informativos del día abran con el gran titular de la leve mejoría en las cifras del paro, esto permite a ciertos economistas monclovitas de tienda de los chinos prender la traca de la euforia, asidos a una línea de tendencia travestida de pura estacionalidad. Echo en falta la vergüenza profesional del informador, para destacar que en los últimos 12 meses la cifra de desempleados aumentó por encima de los 400 mil. Las prisas por redactar el guión son malas consejeras, en cambio son el bálsamo de fierabrás para lanzar requiebros al palco presidencial.
Según Zp los hamaqueros y chiringuiteros del Ibex 35 pasan, sin transición alguna, de ser especuladores sin alma al sacrosanto mercado. El mismo que clama por una remolona practicanta forastera, sí hombre, esa que pone inyecciones de confianza marca triple A. Sin ella no podemos sacar pecho, sino colocar manojos de perejil a san Pancracio y aguardar a que descampe o que san Obama pulse Spain en su Blackberry.
Cualquier estudiante de primero, (Economía o Empresariales), sabe que una serie sin desestacionalizar es tan representativa como la venta de mantecados en pleno agosto o la de bikinis en enero.


Impresiones

Todo es subjetivo, dejemos volar el yo imposible.

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Tratando la conjución de ocurrencias e imágenes. No pongo música porque se cabrean los de la SGAE.